jueves, 3 de junio de 2010

El reglamento reinventado.

El reglamento reinventado.









El pasado treinta y uno de Mayo asistí como espectador a la competición hípica “Gran premio del G IV” que se celebraba en el Club Hípico La Atalaya de Tenerife, con muy escasa participación tanto de jinetes/amazonas, como de público.


Antes de la celebración de la última prueba hablaron por megafonía varias personas, la actual tesorera del club hípico La Atalaya, el presidente del mismo, el dueño del Centro Hípico del Sur y la actual vocal de salto de la FCH.


¡Lamento no haber tenido la grabadora a mano! Básicamente se quejaban de la situación, de lo que costaba organizar un concurso así, de los escasos participantes y público…


El espectáculo me pareció grotesco y patético. Si me lo permiten, triplemente grotesco y triplemente patético.




Primero, el mensaje que estaban dando no parecía en modo alguno que fuese dirigido a los que estaban y participaban, sino más bien a los que no estaban o no participaban. Por eso me parece grotesco. Si quieren comunicarse con los ausentes hay muchos medios, yo no los voy a citar ahora, para no dejarme alguno atrás. Pero si les voy a ofrecer este blog para que se expresen y digan lo que piensan y lo que sienten.




Segundo resulta grotesco que ahora se lamenten de la escasa participación, después de consentir y protagonizar un montón de hechos mediante los cuales se espantaban y se les cerraban las puertas a un montón de gente, que a disgusto por el ambiente que se crea deciden hacer otra cosa o en otro sitio. Me refiero al apoyo y cobertura que les vienen dando a la reforma que está haciendo la RFHE desde hace unos años y a muchas actuaciones que han protagonizado, obstaculizando a mucha gente la participación en este deporte.


Es curioso que ese mismo día treinta y uno de Mayo, en el municipio de Los Realejos, se celebrase otro evento hípico con setenta y siete participantes en el transcurso de la mañana y por la tarde con una carrera tradicional con cuarenta y un inscritos. Y de público, mejor no hablar. Todos coinciden que los asistentes eran miles.


Hay que plantearse, que algo no se está haciendo bien.


A mí no me parece bien echar ese tipo de sermones a nadie, sin derecho a réplica. Y mientras se siga haciendo oídos sordos a lo que tienen que decir muchas personas se seguirá desconectado de una parte de la realidad y se seguirán cometiendo los mismos errores.




En tercer lugar me parece patético que personas que considero serias, responsables, que tienen reconocido prestigio en sus profesiones respectivas y en sus empresas, no se den cuenta de la situación y todo lo que se les ocurre es soltar ese discurso.


¡Patético! Por un momento pensé: “solo les falta el pañuelo de lágrimas”.


Les dejo con una grabación que refleja muy bien lo que digo. Fue filmada oportunamente por Antena 3 TV hace algunos años y es para “enmarcarla” y no perderla de vista, pues muestra el mal que aqueja a los jueces hípicos de Canarias y especialmente a las personas que se han formado en ese club hípico que se ve en la grabación.










Me gustaría comentar algo, especialmente para los que no están familiarizados con el Reglamento a aplicar y con el que debe de ser el correcto proceder de un Juez que se precie y que represente dignamente a este deporte.

El Reglamento General de la RFHE en su artículo 121 punto 5 especifica, y especificaba por aquel entonces (la grabación es de hace unos años): “La bandera española deberá llevarse en la mantilla o sudadero en todos los concursos internacionales en los que se participe.”
Es decir es OBLIGATORIA para todos los participantes españoles en competiciones internacionales, sean del equipo olímpico, o no, lo cual es una gran responsabilidad siempre y un gran problema en muchas ocasiones, por ejemplo en un raid.
Otra cosa muy distinta es el escudo olímpico, o la bandera en la chaqueta, que el Reglamento deja bien claro para quien está reservado.
En cualquier caso la prohibición no aparece por ningún lado. Sencillamente el Sr. Miguel Hernández (Delegado Federativo del concurso de la grabación y administrativo del Club Hípico La Atalaya desde hace muchísimos años) se la inventa y miente ante las cámaras cuando dice “que el reglamento dice que no se puede llevar absolutamente nada, ni publicidad alguna”.
El Sr. Miguel Hernández, como Delegado Federativo, no comunica por megafonía ni por ningún otro sistema al participante que acaba de eliminar, el motivo de su eliminación, sencillamente dice, cuando el participante le insiste, “porque lo digo yo”, y no lo dice por megafonía como debería de hacer, como hace con el resto de los participantes, cuando son eliminados por rehúses, caída, error en el recorrido… Impidiendo con ello que se conozca el motivo públicamente y que el participante se pueda defender con una reclamación.
¡A eso se le llama jugar limpio!, vamos sin dejar rastro y sin ensuciarse las manos.
Suerte que esta vez estaba allí Antena 3 para dejar constancia de la clase de jueces que tenemos en la hípica canaria.
Pero no piensen que esto era algo nuevo ni en lo que estaba solamente el Sr. Miguel Hernández, no, ya habían protagonizado acciones similares otros jueces, siempre ligados al citado Club, como la Srta. Gómez Bursaco, o el Sr. Juan Capote, con quienes se había dialogado al igual que con el Sr. Hernández, e informado de las consultas hechas a la RFHE.
Recuerdo perfectamente la reacción del Sr. Miguel Hernández cuando D. Alejandro Suarez, en la barra del bar del citado Club, intentaba mostrarle lo que decía el Reglamento.
El Sr. Hernández le contestó groseramente (algo que no parece muy extraño en el) con un “pero niñato, me vas a decir que no se leer”.
El Sr. Alejandro Suarez, no se ha distinguido nunca por ser un niñato. Más bien al contrario. Su expediente en aquellos tiempos era siempre el de matrícula de honor en uno de los colegios más prestigiosos de la isla. Ahora es todo un veterinario con sobresalientes y matriculas, terminando con el número dos de su promoción. Que tenía, y tiene muchas lecciones que dar a Sr. Miguel Hernández por muy Delegado Federativo que se crea.
Con una actuación como esta, me da la impresión de que el Sr. Miguel Hernández no conoce el Reglamento ni por el forro.
Otro tanto cabe decir de la Srta. Gómez Bursaco, cuando siendo Juez de un concurso, indicó por megafonía al Sr. Alejandro Suarez, que : o tapaba la Bandera de España de la mantilla de su caballo, o abandonaba la pista. Todo, por supuesto, sin tener ninguna base reglamentaria.
La cosa no queda ahí, estos Jueces, no reflejan en modo alguno, estos incidentes en sus actas. ¡Hay que jugar limpio, y no mancharse las manos con estas cosas!
Y lo peor de este caso, es que cuando otras instancias federativas y deportivas como el Comité de Competición, o el de Apelación, o el propio Comité de Disciplina Deportiva del Gobierno de Canarias tienen constancia del caso, y por supuesto denuncias, miran para otro lado y no hacen nada, consintiendo que estos personajes queden impunes de sus abusos de autoridad.
Y claro, con todas estas actuaciones, y con este “modus operandi” lo que se consigue, aparte de saltarse el Reglamento, es desanimar al personal. A propios y extraños, que no comprenden lo absurdo de la conducta de estos Jueces prohibiendo estas cosas y de esta manera.
!Un evento deportivo donde se obliga a tapar la bandera nacional!
¿A quién le gusta y le regodea ese espectáculo?
¿Quién tiene el mal gusto de divertirse con estos directores de orquesta?
Por eso resulta grotesco y patético que vengan a lamentarse y quejarse del resultado que han obtenido con esta y otras muchas actuaciones.
!Ah! casi se me olvidan las posibles alternativas para que la crítica sea constructiva.
La gente no es tonta, no considerar su punto de vista, o ni tan siquiera escucharlo, es despreciarla. Y nadie va a donde se la desprecia o se la “mira por encima del hombro”.
Si se les pregunta, es de esperar que digan por qué no van. Pero, hay que hacerlo, es decir preguntarles a los que no van y no a los que si van.
Se incumple sistemáticamente el avance de programa y como no sea por “radio macuto”, no hay manera de enterarse.
En este último concurso estaba programado celebrar GIV a las cuatro de la tarde del treinta y uno de Mayo. Según se comunica con el avance de programa. Se cambia y no se comunica. En todo caso se hace por megafonía y a los asistentes. A los que tienen otra actividad y han programado estar allí solo para esa prueba no les llega ningún mensaje. Y esto es lo habitual.
¿Cómo se va a motivar al público de fuera con estos cambios que son sistemáticos?
En cambio, la carrera de Los Realejos antes citada fue puntual y de acuerdo a lo anunciado en todo. Algo de lo que debían de tomar buena nota otras organizaciones.
Por tanto: puntualidad y respeto al avance de programa.
Es evidente que el Reglamento no puede reinventarse sin previo aviso. Además la función legislativa no recae en ningún caso sobre los Jurados de Campo ni sobre los Jueces, ni sobre los Delegados Federativos. Estos en cualquier caso y de FORMA EXTRAORDINARIA podrán tomar medidas por causa de fuerza mayor. Y siempre dejando constancia en las actas e informando de las sanciones adoptadas al Comité de Competición, como especifica el Reglamento.
Si el Reglamento se reinventa sin previo aviso, y los jueces no lo respetan, si no consideran la presunción de inocencia, ni el derecho a la legítima defensa, ¿Quién cree que va a practicar deporte en esas condiciones?
La consecuencia, respeto al Reglamento sin reinvenciones improvisadas. ANTE LA DUDA, INTERPRETARLO SIEMPRE A FAVOR DEL PARTICIPANTE, especialmente cuando la interpretación es irrelevante para el resultado deportivo o la clasificación.
Respeto riguroso del derecho a la presunción de inocencia y a la legítima defensa contemplados en el Reglamento.
Falta dialogo y sobra soberbia por parte de los jueces formados en ese Club hípico. Y también, porque no decirlo, por parte de muchas de las personas que forman el ambiente de ese Club.
A estas alturas, creo que deberían de darse cuenta, que no son el centro del mundo, ni el de la hípica. Y que en no pocas cosas, son precisamente el ejemplo a no seguir.
No viene mal un poco de dialogo, sobre todo con quien no piensa como tú.
Tampoco viene nada mal un poco de humildad, en momentos como estos.

A diferencia del monologo sin derecho a réplica que nos ofrecieron con su discurso las personas que antes cité, aquí pueden comentar lo que quieran. Si el formato de comentarios se queda pequeño, pueden hacerlo con un correo electrónico a: miguelgomez57@hotmail.com , me comprometo a publicar cualquier opinión siempre que respete las normas de Google.

Ducha de vitalidad para los amigos de la hípica canaria.







Una Persona que sabe de la situación que se vive en la hípica canaria me ha enviado este escrito y lo transcribo, tal cual.


"Lo que le falta a la gente de la hípica canaria es dejarse de chismorreos por detras, ser ella misma, de acuerdo a sus necesidades y circustancias.Oponerse a las manipulaciones de las que es objeto desde la RFHE y desde la FEI y "DECLARARSE VIVA" de una vez sin complejos de ningún tipo.
Este texto de un indio americano le viene como anillo al dedo:

¡Me declaro vivo!

Antes cuidaba que los demás no hablaran mal de mí,
entonces me portaba como los demás querían
y mi conciencia me censuraba.
Menos mal que a pesar de mi esforzada
buena educación siempre había alguien difamándome.
¡Cuánto agradezco a esa gente que me enseñó que la vida no es un escenario!
Desde entonces me atreví a ser como soy.
He viajado por todo el mundo, tengo amigos de todas las religiones;
conozco gente extraña:
católicos, religiosos pecando y asistiendo a misa puntualmente,
pregonando lo que no son,
personas que devoran al prójimo con su lengua e intolerancia,
médicos que están peor que sus pacientes, gente millonaria pero infeliz,
seres que se pasan el día quejándose,
que se reúnen con familia o amigos los domingos para quejarse por turnos,
gente que ha hecho de la estupidez su manera de vivir.
El árbol anciano me enseñó que todos somos lo mismo.
La montaña es mi punto de referencia:
ser invulnerable, que cada uno diga lo que quiera,
yo sigo caminando indetenible.
Soy guerrero:
mi espada es el amor, mi escudo el humor,

mi hogar la coherencia, mi texto la libertad.
Si mi felicidad resulta insoportable, discúlpenme,
no hice de la cordura mi opción.
Prefiero la imaginación a lo indio, es decir inocencia incluida.
Quizás solamente teníamos que ser humanos.
El que tú no veas los átomos, no significa que no existan.
Por eso es muy importante que sea el Amor
lo único que inspire tus actos.
Sin Amor nada tiene sentido, sin Amor estamos perdidos,
sin Amor corremos el riesgo de estar de nuevo
transitando de espaldas a la luz.
En realidad,
sólo hablo para recordarte la importancia del silencio.
Anhelo que descubras el mensaje que se encuentra
detrás de las palabras; no soy un sabio,
sólo un enamorado de la vida.
El silencio es la clave, la simplicidad es la puerta
que deja fuera a los imbéciles.
La gente feliz no es rentable,
con lucidez no hay necesidades innecesarias.
No es suficiente querer despertar, sino despertar.
La mejor forma de despertar es hacerlo
sin preocuparse porque nuestros actos
incomoden a quienes duermen al lado.
Recuerda que el deseo de hacerlo bien será una interferencia.
Es más importante amar lo que hacemos
y disfrutar de todo el trayecto.
La meta no existe, el camino y la meta son lo mismo.
No tenemos que correr hacia ninguna parte,
sólo saber dar cada paso plenamente.
No, no te resistas, ríndete a la vida.
Quien acepta lo que es y se habilita para hacer lo que puede,
encarna las utopías y lo imposible se pone a disposición.
La mejor manera de ser feliz es: ’ser feliz’.
Reconstruye tu raíz y saborea la vida.
Somos como peces de mares profundos,
si salimos a la superficie reventamos.
La frivolidad y la intrascendencia condenan la vida a la muerte.
Cuando somos más grandes que lo que hacemos,
nada puede desequilibrarnos.
Pero cuando permitimos que las cosas sean más grandes
que nosotros, nuestro desequilibrio está garantizado.
El corazón está en emergencia por falta de amor.
Hay que volver a conquistar la vida, enamorarnos otra vez de ella.
Nuestro potencial interior aflora espontáneamente
cuando nos dejamos en paz.
Quizá sólo seamos agua fluyendo;
el camino nos lo tenemos que hacer nosotros.
Más no permitas que el cauce esclavice al río,
no sea que en vez de un camino tengas una cárcel.
La infelicidad no es un problema técnico,
es el resultado de haber tomado el camino equivocado.
Amo mi locura que me vacuna contra la estupidez.
Amo el amor que me inmuniza ante la infelicidad
que pulula por doquier, infectando almas y atrofiando corazones.
El amor es, a nivel sutil, la esencia de nuestra instancia inmunológica.
La gente está tan acostumbrada a complicarse,
que rechaza de antemano la simplicidad.
La gente está tan acostumbrada a ser infeliz,
que la sensación de felicidad les resulta sospechosa.
La gente está tan reprimida, que la espontánea ternura
le incomoda y el amor le inspira desconfianza.
Hay cosas que son muy razonables, objetivas y… apestan.
Ya no podemos perder el tiempo
en seguir aprendiendo técnicas espirituales cuando aún estamos vacíos de amor.
Quienes no están preparados para escuchar
tienen la recompensa de no enterarse de nada.
Disfruta de lo que tienes, recibe lo que venga,
crea e inventa lo que necesites, haz sólo lo que puedas,
y fundamentalmente celebra lo que tengas.
La vida es un canto a la belleza,
una convocatoria a la transparencia
Cuando esto lo descubras desde la vivencia,
el viento volverá a ser tu amigo,
el árbol se tornará en maestro
y el amanecer en ritual.
La noche se vestirá de colores,
las estrellas hablarán el idioma del corazón
y el espíritu de la tierra reposará otra vez tranquilo.
¡Me declaro vivo!

Chamalú.
Indio Quechua"